" El hijo del hombre tiene poder para perdonar los pecados."

"Hijo, tus pecados te son perdonados"

 “Yo te lo mando,: levántate toma tu camilla y vete a casa." (Marcos 2:1-12)
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En todas las "recetas de éxito" hay un consejo que se repite un a y otra vez: No te rindas! No claudiques! Hagas lo que hagas, no te des por vencido! y creo que ese es el secreto; los que llevaban al amigo paralítico lo aplicaron a la perfección: Quitaron parte del techo y por el agujero bajaron al enfermo!

Por la Fé de esos hombres es que Jesús atiende de inmediato al paralítico, pero en vez de primero ocuparse de la enfermedad del cuerpo, le sana la enfermedad del alma, le perdona sus pecados, mostrando que eso es lo más importante, e insinuando que en ocasiones la enfermedad del cuerpo es una consecuencia de que el alma no está limpia.

Jesús dá la orden con autoridad: "Yo te lo mando:"

1. Levántate: es decir: renace, quedas libre de la enfermedad,

2. Toma tu camilla: renuncia a aquello que te ha enfermado,

3. Vete a casa: Regresa a tu casa, a tu familia, sigue viviendo.

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Jesús dice: " Levántate!"

Contestación: " Tu me das nueva vida, Señor."

Acción de Jesús: "Perdona."

Oración: Padre, tu misericordia es infinita, no caduca, gracias por que tengo la oportunidad cada día de rectificar, y limpiar mi vida entera, coloco en tu regazo lo que me tiene paralizado, por favor  levántame, por Jesucristo, Nuestro Señor, Amén.

Con Cariño y Respeto
Edith Rizo