Aclamación: "Señor, tú eres el salvador del mundo, dame
de tu agua viva para que no vuelva a tener sed ."
Evangelio: Juan (4:5-42)
Los perjuicios nos limitan porque nos hacen pereder la oportunidad de lo nuevo. Cuándo juzagamos, y nos cerramos a interactuar con una persona por su apariencia o por su "reputación" estamos faltando en la caridad, un interés por los demás abre las puertas de nuestro corazón, por medio del diálogo aunaque sea sencillo, o corto, muestra el rostro de Cristo.
Seamos portadores de La Palabra de Jesús con nuestros actos, demos de beber al sediento, y de comer al hambriento, recordando que nosotros mismos estamos sedientos de amor, justicia, y paz. Jesús manatial vivo, sacia nuestra sed cada día, nos refresca y limpia, para compartir con nostotros el regalo más hermoso la vida eterna.
Jesús dice: "Dame de beber."
Contestación: "Señor, te entrego lo que soy"
Acción de Jesús: "Sacia"
Oración: Padre, todo lo que viene de tí es bueno, enséñanos a buscar siempre la fuente de agua viva, para que seamos saciados por tí cada día, refresca nuestra vida, limpia nuestro corazón y permite que nunca dudemos de tu amor, por Jesucristo Nuestro Señor, Amén.
Edith Rizo
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