martes, 19 de abril de 2011

Para obedecer al Padre, quisiste ser llevado a la cruz...


Aclamación: "Señor Jesús, rey nuestro, para obedecer al Padre, quisiste ser llevado a la cruz, como manso cordero al sacrificio." Evangelio: Juan (13:21-33)


Llegaba en término de la estancia de Jesús entre sus discípulos, esto era una despedida.."A dónde yo voy, no puedes seguirme ahora, me seguirás más tarde." la ternura con la que Jesús se dirige a sus apóstoles: Hijitos todavía estaré un poco entre ustedes pero....era una manera de prepararlos para los acontecimientos tan dolorosos que les tocaría enfrentar, pero los alienta: me seguirán más tarde... esto se puede interpretar cómo me alcanzarán, los estaré esperando, voy para prepararles el lugar, compartiré con ustedes el lugar dónde estaré.

Jesús obedece por amor al Padre, y es quien ofrece el mayor sacrificio y esfuerzo por el bien de muchos, no es egoísta, no piensa en él, sólo piensa en los demás, y es así cómo nos entrega un amor desinteresado, limpio y sincero, ese amor que no tiene fin.

Jesús dice: "Te amaré hasta la muerte"
Contestación: "Gracias por tanto."
Acción de Jesús: "Se entrega"


Oración: Padre, tu amor es infinito y eterno, gracias por tanto! Cúbrenos con ese amor en este día y llénanos de tu Santo Espíritu para que podamos apreciar sinceramente este sacrificio limpio y puro que ha sido ofrecido por nuestra salvación, por Jesucristo Nuestro Señor, Amén.

Con todo mi cariño, y enorme respeto,
Edith Rizo

No hay comentarios:

Publicar un comentario